- La conservación y recuperación del pasado de Burriana permite contemplar hoy los grandes monumentos religiosos que sorprenden majestuosos
- Con el esplendor del comercio de la naranja durante los siglo XIX y XX afloraron numerosos edificios modernistas que aún hoy asombran por su atrevimiento
Dentro de la amplia oferta turística, cultural y de ocio que ofrece la ciudad durante el verano, el Ayuntamiento de Burriana propone una visita guiada nocturna por los rincones histórico-culturales de la ciudad, para descubrir su historia y patrimonio artístico y cultural. La primera será este sábado día 25 de julio a las 10 de la noche.
La visita recorrerá la parte histórica de la Basílica de El Salvador, declarada Bien de Interés Cultural, el Pas de Ronda, la Cripta, la Vila Medieval, el 'Templat' y las murallas, pero también se podrán conocer diferentes aspectos de las viviendas de arquitectura modernista de principios del siglo XX que florecieron en Burriana al amparo del auge económico derivado del comercio de la naranja.
La actividad guiada, destinada a todos los públicos, se realizará en dos grupos y tendrá su punto de partida en la plaza Mayor, a las 22 horas. La próxima visita guiada será el próximo 22 de agosto a la misma hora.
Para participar se requiere realizar la reserva 15 días antes de la actividad en la Oficina de Turismo del Arenal situada en la Av. Mediterrània, 35, en el Port de Borriana, de lunes a domingo de 10h a 14h y de 17h a 20h, o llamando al 964 587 078.
La visita respetará en todo momento las medidas sanitarias establecidas, en la que será obligatorio el uso de la mascarilla durante todo el recorrido y será necesario mantener la distancia de seguridad.
La concejala de Turismo, Sara Molina, ha destacado que esta actividad permitirá a las personas participantes “descubrir una visión diferente de la parte más antigua de la ciudad, con los edificios más destacados y con la ayuda de la iluminación nocturna”.
Burriana se convirtió, hace años, en un destino vacacional característico de la costa del litoral Mediterráneo, situado a tan solo 15 kilómetros al sur de la ciudad de Castellón. Su identidad y su alta calidad paisajista han atraído a los turistas, permitiendo disfrutar de su agradable brisa marina durante todo el año.
La localidad se caracteriza por ser una ciudad tranquila y alejada de grandes masificaciones, capaz de presentar un amplio recorrido turístico que empieza por descubrir su historia y patrimonio artístico y cultural, y termina ofreciendo un turismo activo muy apreciado y valorado por el sector.
El centro de la ciudad alberga la primera iglesia románico-gótica construida en tiempos de Jaume I, tras la conquista del antigua Reino de Valencia, conocida como la Basílica de El Salvador (Monumento Histórico-Artístico), así como otros edificios singulares como el antiguo convento de la Merced, donde se encuentra el museo Arqueológico Municipal, el templo de San José (o iglesia dels frares) y los edificios modernistas de comienzos del siglo XX.
Paralelamente, con el esplendor del comercio de la naranja durante los siglo XIX y XX afloraron numerosos edificios modernistas que aún hoy asombran por su atrevimiento.
El Templat
También podemos destacar el campanario de Burriana, conocido popularmente como El Templat, que fue construido en el 1363, bajo el reinado del rey Pedro IV el Ceremonioso, cuya función no era solamente defensiva, sino también torre de comunicación y reloj público.
En sus inicios se encontraba exenta a la iglesia, por lo que contaba con dos puertas de acceso: la que permite su entrada en la actualidad desde la plaza y una segunda que hoy en día permite comunicar la torre con el interior de la iglesia.
En 1938, tres grandes explosiones derribaron la torre, causando la ruina de muchas de las casas que se encontraban alrededor de la plaza Mayor y del Pla. No fue hasta el año 1942 cuando se iniciaron las obras de reconstrucción, las cuales conservaron la misma cimentación, la base maciza del fuste y una fidelidad estética que contó con el aumento de la altura de éste en 10 metros, con la intención de que fuese el más esbelto y mayor de toda la Comunitat Valenciana.