- El Centro de Formación ha acogido una jornada formativa relacionada con la medición de ruidos generados por actividades y vehículos
- Se han impartido los principios básicos de actuación que deben realizar los agentes para una correcta medición acústica mediante sonómetro
La Policía Local de Burriana ha realizado una jornada formativa en su Centro de Formación sobre medición de contaminación acústica, en la que se han impartido los principios básicos de actuación que deben realizar los agentes para llevar a cabo una correcta medición acústica mediante sonómetro de ruidos generados por actividades y vehículos.
La formación ha sido a cargo del inspector-jefe de la Policía Local de Finestrat (Alicante), Agustín Rubio, mando policial de dilatada experiencia en el control de establecimientos en una zona tan turística como la Vega Baja alicantina, de notable saturación de actividades generadoras de contaminación acústica.
A lo largo de la jornada, enmarcada en el programa formativo de este año para la Policía Local, se han abordado diferentes asuntos jurídicos relacionados con la normativa estatal, autonómica, local y la jurisprudencia más relevante, y también cuestiones técnicas y metodologías, estudiando la operativa en el uso de sonómetros en sus diferentes configuraciones, así como la problemática más habitual en el control de la contaminación acústica.
El jefe de la Policía Local de Burriana, Raúl Amat, ha explicado que con este curso se pretende mejorar la formación de los agentes “en aras a la prestación de un servicio más completo y profesional a la ciudadanía”, y ha señalado que los problemas relacionados con las molestias por ruidos, tanto de establecimientos como de vehículos, “es una demanda cada vez más frecuente, generando una importante demanda de servicios a la Policía Local”.
Al respecto, ha señalado que “no en vano las autoridades sanitarias relacionan directamente algunos problemas de salud con los niveles sonoros que soportan las personas en el ámbito urbano y cuyo control y sanción recae en la mayoría de los casos en la administración local y, por ende, en su Policía”.
La finalidad de este curso, ha concretado Amat, es que los efectivos “conozcan cómo sacar el máximo partido a estos aparatos sonómetros, fundamentales para controlar el impacto acústico en el municipio como consecuencia de las reclamaciones vecinales por contaminación acústica”. Y esa labor, ha indicado, implica “saber utilizar esos instrumentos y contar con el conocimiento adecuado sobre la normativa vigente aplicable y el resto de herramientas que existen y que facilitan este trabajo”.
La alcaldesa de Borriana y responsable de Seguridad, Maria Josep Safont, ha puesto en valor esta iniciativa y ha destacado el “importante avance” que esta formación supone para “mejorar este servicio tan esencial y básico para la ciudadanía” y para los agentes, cuyo deber “no solo se centra en garantizar la seguridad de la población, sino también ayudar a que exista una buena convivencia en el municipio”.